Ya se ha iniciado como cada año, fundamentalmente coincidiendo con el fin de los cursos escolares, el éxodo masivo de personas que abandonan las ciudades y se conducen hacia el campo, los pueblos o la costa para disfrutar de unas merecidas vacaciones de verano. Durante este período, se espera que millones de personas utilicemos las carreteras españolas, lo que inevitablemente conduce a atascos de tráfico y a un aumento en la posibilidad de accidentes.
